Cuando una madre se va, el alma se te congela… ya no tienes
el abrigo de sus abrazos… no tienes el aroma de su vida… de su pelo, de su
amor.
Te vuelves indecentemente arisca, no puedes pararte a pensar
que no la vas a ver más, que no te va a sonreír al verte, que no te va a dar
consejos, que no vas a sentarte en su mesa y te vas a comer todo lo que con
tanto cariño ha cocinado y tan salvajemente bien sabe esa comida.
Piensas que tu madre se ha ido con la más absoluta dignidad.
No se ha quejado, no la has oído quejarse mientras se iba… solo la has abrazado
y le has dicho… “mami, estoy aquí, te quiero mucho”… hasta quedarse sin
aliento. Después te has ido a la calle y has caminado rápido hasta quedarte sin
aire, mirando la cara de la gente, que cruza la calle, que mira escaparates,
que sonríe, que corre… ajenos a tu dolor, tanto dolor, tan puto dolor, tan
infinito dolor, tan dolor, tan.
Cuando una madre se va es la misma sensación que cuando te
cortaron el cordón umbilical… te asustas, lloras, te cortan el vinculo que te
daba la vida y comía por ti, respiraba por ti, reía para ti, cantaba para ti, dormía
por ti, descansaba por ti… y sientes en ese momento, la más absoluta soledad…
aun estando rodeada de gente.
Hoy he escuchado una canción que grabaste, porque cantabas
muy bien, para alegrarnos el rato, que es a lo que te has dedicado toda tu
vida, a cuidarnos y darnos lo mejor… y sobre todo a enseñarnos que hay que
amar, que cuanto más ames, más feliz eres… y yo, desde lo más profundo de mi energía,
mami, quiero agradecerte todo lo que has hecho por mí en todos estos años,
quiero que sepas que te quiero con toda mi alma y que siempre te querré,
siempre, siempre estarás escondida en lo más profundo de mi corazón, donde no
hay contaminación, donde bombea mas mi vida y desde donde quiero que estés para
que sientas todas estas cosas que yo siento por ti.
TE QUIERO TANTO MADRE MIA!!!
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ResponderEliminarMª del Mar
Yo solo quiero recordar ...cuando hablas de esas comidas tan ricas, que hace poco fuimos a comer con unos amigos comida tipica de la Mancha y que Pedro me dijo...mira...atascaburras,..y vinieron a mi tantos recuerdos de esas Nochebuenas que pasabamos y que nunca faltaba ese plato estrella. Nadie lo hacia como tù mama ..y ya no volvera a estar en nuestra mesa de Nochebuena.
ResponderEliminarSigue recordandola Coni con esas canciones que tanto le gustaba cantar...ella estara siempre presente en todos nosotros
PORRI
Precioso
ResponderEliminarConi casi no se que comentar de esta entrada tan llena de sentimientos, de esa rabia por la ausencia y de ese dolor que poco a poco va dejando paso a los bellos momentos vividos y que me dices de ese gran corazón lleno de amor que ha sabido dejar en vosotras. Un fuerte abrazo ( valle )
ResponderEliminarAl irse tu mamá mi abuela decidió acompañarla para hacerle compañía en tan largo viaje. Mi abueli ES así. Generosa, dicharachera, compañera, graciosa como ella sola, presumida, cantante, cuentacuentos, costurera, cocinera, maestra, enfermera, economísta, peluquera, miss del paseo, asesora del amor, paño de lágrimas, fabricante de sonrisas, creadora de vida y más vida. Grande! Mi abueli ES grande!!
ResponderEliminarY también la echo mucho de menos. Ah! Y a la ardillica... Esa ardilla aventurera que vivía dos mil y un historias. Que lo mismo te escalaba el pico más alto sin cuerda, que igual te bailaba un charlestón en el guateque de su barrio. Esa ardilla era una crack, servía pa' un roto y pa' un descosío. Mi ídola. El ejemplo que me enseñó a no rendirme nunca y seguir luchando pese a cualquier adversidad. Hay que ver lo que me gusta una ardilla!!
Abueli, gracias por todo el legado que has dejado a tu paso. Gracias por todas y cada una de las cosas que has hecho por y para nosotros, los tuyos. Gracias por tu amor. Pero sobre todo, gracias por presentarme a esa ardillíca sin miedo que se sentaba a la mesa conmigo todos y cada uno de los días que duró mi infancia.
Te quiero preciosa!!
P.D.: Míma, yo estoy contigo. No puedo sustituir todas esas cosas que ofrece una mamá pero siempre estaré a tu lado. Compartiendo contigo todo lo que aprendí de la ardilla sin miedo. Te adoro.
Esa expresión de dolor, de sentirse sola, de que es para siempre, no se puede evitar. Me gustaría ayudarte diciéndote que tú eres una parte de ella. Llevas su sangre, sus genes y hasta el modo de pensar, de vivir. Tenemos que conformarnos con eso. La vida, igual que viene, se va. Un beso!.
ResponderEliminarTanto podría expresar... Destaco tu gran amor a tu madre y la forma de expresarlo.
ResponderEliminarEl de Mery y la fuerza de expresarlo
Porque ella tiene la fuerza de la palabra desde su corazón.
Ese dolor es porque además de madre, fue una buena madre. ¿No sería más dolor si al haberse ido, no haber sentido apenas nada por ella?. Dolor no lo sé pero sí un tremendo vacío.
Además de buena, fue sabia. Repartió su amor por igual hacia sus hijos. Eso ha hecho que que toda la familia seais una piña. Gran mujer, gran persona.¡ mi admiración!. Besos!.