Ana Cat no sabía qué hacer ese día….Noa se había ido….y las luciérnagas
revoloteaban alrededor de Ana Cat intentando iluminar su oscuro momento.
Los caritrimonis llamaron a su puerta con la cabeza baja y
lagrimillas en los ojos…al rato, los ritrosilandros y también los lukirados…..Todos
acudieron a la casita de cascara de pipa de Ana Cat y sus luciérnagas, a darle
el ultimo adiós a la gatita Noa…”Ha estado trece años con nosotros….son muchos
años”, decía Anita a sus amigos.
Ese dia, el cielo era purpura y el camino de la casita de
cascara de pipa, era reluciente. En breve comenzaría el traslado de Noa a su
lugar donde descansaría eternamente….”Era una gatita tan buena”…decían sus
amigos….y comenzó la marcha. La habían puesto entre todos, ayudados por unas
lianas, en una cajita de cartón, sin tapaderas y la habían adornado con
trocitos de espejo y unas florecillas que crecían entre las cascaras de pipa de
la casita de Anita.
Al rato de estar caminando…pasaron por un pequeño lago y
Anita se agacho a coger un poco de agua para refrescarse….cuando ¡de
repente!..apareció la imagen de Noa en el lago….y con su aguda voz susurrante
dijo….”Ana Cat, dile a tus amigos y a las luciérnagas, que no me he marchado,
que ahora estaré en todos los sitios donde veáis vuestra imagen reflejada”…y
Anita, muy contenta le pregunto….”¿Dónde estarás Noa?”…y ella le contesto….”Estaré
en los espejos, en el agua, en el suelo cuando le pongas abrillantador, en las
grapadoras metálicas, en las gotas de rocío de los arboles…pero sobre todo,
quiero estar en vuestro corazón….limpio y puro…ahí habitare hasta que vosotros queráis,
así que, no estéis tristes….¡yo puedo veros!”…y Ana Cat se fue corriendo a decírselo
a sus amigos y a sus luciérnagas…..y desde entonces….Noa está reflejada en
todas las cosas bellas que la vida nos presenta.
¡¡¡Hasta siempre Noa, no te olvidaremos!!!
Que bonito Coni, esa gatita se nota que ha tenido mucho cariño y su dueña estara muy contenta con esta bonita historia,un besazo
ResponderEliminarPORRI
Gracias de corazón, es precioso!
ResponderEliminar¡ Precioso!!
ResponderEliminarPreciosa y emotiva historia. Se les coge tanto cariño que siempre viven en nuestros recuerdos. No me olvido de mi primer perro que me regalaron cuando tenía unos nueve años. Era más que un amigo. Un besito Coni!.
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